"Là où la vie emmure, l’intelligence perce une issue"
Marcel Proust.
Decirle adiós a los momentos, a los espacios, y a las personas que han formado parte de nuestra vida, la mayoría de las ocasiones resulta particularmente difícil, sin embargo, son decisiones necesarias para continuar nuestro camino.
El verdadero peligro de las despedidas y el previo conocimiento propio de que nada volverá a ser igual, genera incertidumbre en el presente, ya que no hay una seguridad del tiempo exacto en que sucedan.
Reflexionar demasiado no siempre es la mejor opción, tratándose acerca de las ideas de marcharse, de alejarse, y de darse la media vuelta y seguir adelante. Por supuesto que todo va a depender de aquello de lo que nos despediremos, pero siempre debemos tener claro que si a nuestra mente llega la idea de dejar algo atrás, quizá sea porque no nos encontramos completamente felices y satisfechos de estar viviendo esa situación.
Dicen que los mejores guerreros, son aquellos que soportan y superan los mayores obstáculos, pero si a la situación sobre la que deseamos alejarnos, le aplicamos esta reflexión, sobreponiendo nuestro cuidado, amor personal y profesional, para no marcharnos y seguir ahí, mi mayor recomendación sería obtener una respuesta positiva, ya que de ser negativa, debemos recordar que todo fluye y que no es necesario permanecer en sitios que no procuran y salvaguardan lo mejor de nosotros.
Decir adiós está bien, insisto en este punto, porque no es una cuestión que nos enseñen o para la que nos preparen desde chicos, pero si no sentimos una plena satisfacción en nuestro yo interior, renunciar a lo que no nos suma es lo mejor que podemos hacer, para construir nuestra vida de la forma que nosotros deseemos… No importa en qué sitio nos encontremos o si es el inicio, el intermedio o el final del episodio, si no estamos siendo completamente nosotros, no vale la pena seguir andando en caminos que no tienen un destino final.
Lo importante es aceptar la realidad que vivimos y descubrir la puerta de salida hacia un mejor lugar. No hay espacio para tener miedo, cuando se trata de buscar y encontrar lo mejor para nosotros. The universe speaks to us always, bien dice Oprah, el detalle está en escuchar los susurros que nos dice y decidir sobre nuestro papel en la vida, qué podemos hacer para cambiar lo que no nos agrada.
Sin duda, cerrar un capítulo e iniciar uno nuevo es y siempre será duro, pero la satisfacción que ganaremos será mayor al peso que sentimos por continuar donde no deseamos estar, la respuesta siempre será Avanzar.
Libertad, riesgos y felicidad.
Vívela siempre.