One feels inclined to say that the intention that man should be 'happy' is not included in the plan of 'Creation.'
Sigmund Freud, Das Unbehagen in der Kultur.
Summer of 1929.
Hace algunos días, por casualidad, una imagen del pasado apareció a mitad de mi camino y me hizo dar cuenta de lo libre que soy de todo aquello que me ha hecho daño, y de reflexionar sobre lo agradecida que le estoy a la vida de aprender a cada momento de las tantas alegrías, tristezas, fracasos y logros que he experimentado y conseguido en el pasado, de las que hoy construyo, y de las que mañana se volverán una realidad.
La verdad te hace libre, y sobre encuentros y casualidades, ya decía Santiago Ramón y Cajal que la casualidad no sonríe al que la desea, sino al que se la merece, y la verdad que hoy no tengo ni la menor duda sobre lo cierto que tiene esa frase. Cuando te dedicas a vivir tu vida y no la de la persona de al lado, si te ocupas más en la búsqueda de tu felicidad, el camino te va mostrando, sin solicitárselo, ciertas situaciones que no merecen la pena por hallarse tan lejos de ti y de tus planes, y de la misma forma te permite vivencias que valen la total pena para tu continuo desarrollo y estabilidad personal.
Quizá cobrar realidad del presente sea tan difícil como atreverse a liberar todo lo que está oprimido en nuestros corazones pero cuando estás abierto a recibir en tus aires todas las partículas que habitan este planeta y a ser feliz, nada, nada en lo absoluto, cuesta trabajo, no, ni siquiera quedar bajo la lluvia sin una sombrilla.
Hay tanto por descubrir todos los días, que eso es justo lo que se disfruta desde el minuto uno después de despertar. No hay pretexto para continuar con tristezas, malos tratos e inseguridades que otros seres puedan provocar en nosotros, y más importante que la falta de motivos para soportar todo eso, no hay tiempo de sobra, no, no para vivir eso.
Es mucho mejor sonreírle, desearle lo mejor al pasado que no tiene nada ya en común, darse la media vuelta y seguir andando, que el día de hoy apremia. Es mejor mantener el ritmo y perseguir la idea de mudarnos y encontrarnos en el barrio de la alegría, y a diferencia de Sabina, no bajar la guardia para que no haya salido ya el tranvía de la calle melancolía.
Suele parecer difícil no sentirse mal por lo que no salió como nosotros esperábamos, en realidad, no lo es. El que quiere puede, y si hay algo que les confirmo es que cuando ya lo has intentado todo por que algo suceda y no ha sucedido, no tienes nada que reprocharte a ti o al destino. Quizá aquí sea importante precisar que lo anterior aplica, si, y solo si, lo has intentado todo ya, porque de no hacerlo, inténtalo hasta lo imposible y ya verás lo que sucede, que luchar por lo que quieres y es para ti, no es lo mismo que aprender a soltar lo que no es para ti, que en esta vida nada tiene una conclusión final, somos seres humanos.
Sobre un momento del pasado por el que puedas sentirte perseguido… De corazón te digo que no descuides lo que ahora tienes y que has logrado por aquello que has tenido o que has creído tener y que realmente no era así. Decide ser feliz hoy y todos los días del mañana, y sobre aquellos días del pasado que te hicieron sentir que no podrías superar el dolor o la frustración en un futuro, convéncete de que todo aquello, bueno o malo, se llama experiencia, y que hoy gracias a todo lo vivido eres una persona grandiosa, llena de ilusión y de amor, que brilla con luz propia.
Después y durante todo, ocurrirán mil y un casualidades, buenas o malas, lo mejor es adoptar la idea de que por algo transcurre y ocurre así la vida, y que siempre será ideal conocer la verdad por si sola y verla con tus propios ojos, a vivir en un mundo oculto de la realidad, sea o no por azar del destino. Disfruta el amor tan grande de tu corazón por ser feliz y aprende de todas las experiencias que estén a tu alcance y más allá, no te dejes vencer por nada ni por nadie.
Lucha, vive y goza de lo que más quieres, amas y que te hace feliz, hazlo por tu presente y por un mañana radiante… Como tú.